martes, 26 de agosto de 2014

Vigente a través de los tiempos.

--- En la Desiderata dice ----

…”vive en buenos términos con todas las personas, todo lo que puedas sin rendirte. Di tu verdad tranquila y claramente; escucha a los demás, incluso al aburrido y al ignorante; ellos también tienen su historia. Evita a las personas ruidosas y agresivas, son vejaciones al espíritu. Si te comparas con otros, puedes volverte vanidoso o amargo; porque siempre habrá personas más grandes y más pequeñas que tú. Sé tu mismo. Especialmente no finjas afectos. Tampoco seas cínico respecto del amor; porque frente a toda avidez y desencanto, el amor es perenne como la hierba.
Nutre su fuerza espiritual para que te proteja en la desgracia repentina. Pero no te angusties con fantasías. Muchos temores nacen de la fatiga y la soledad. Junto con una sana disciplina sé amable contigo mismo. Mantente en paz con Dios, de cualquier modo que lo concibas y cualesquiera sean tus trabajos y aspiraciones, mantén en la ruidosa confusión, paz con tu alma.
Ten cuidado. Esfuérzate en ser feliz”…


(Extractado de Desiderata – Iglesia de Saint Paul Baltimore – 1693)

Amigo visitante le estoy tomando la mano a herramientas nuevas, saldrá lo mejor que pueda con lo que cuento. Te saludo!