Pablo y Mariana llevaban cinco años de casados, ella tenía 30 años y trabajaba como técnica radióloga, él 32, y era ingeniero trabajando en venta técnica. Esa noche mientras estaban en los preparativos para la cena le comentó a Mariana: Amor – tengo una buena noticia para darte. Cuál – ¿Me vas a llevar al Caribe ja,ja,ja? Eso ya llegará ja,ja,ja - pues mira, estuve haciendo números y es momento de cambiar el automóvil, sabes que tiene muchos kilómetros y pronto comenzará a dar gastos. ¿Estás seguro de que podemos? – inquirió ella. –
Si, si ya estuve en una sucursal de la concesionaria, me tasaron el nuestro y la diferencia que debo poner en efectivo. Debería entregar todo el miércoles y el martes siguiente pasar por la casa central a retirar el nuevo. Me pone feliz, pero solo te pido que el color sea gris plata metalizada – dijo Mariana. - Me parece bien pero otros colores… ¿no te gustan? No, estoy enamorada de ese color… ¿Ah, y de mi no? - respondió Pablo. -Tú sabes que eres lo más para mi- repuso ella y terminaron en un beso apasionado, que más tarde continuó en el dormitorio. Al día siguiente como tenía previsto, entregó su auto y la diferencia del dinero.
El martes de la semana siguiente, con cierto grado de ansiedad y entusiasmo, se presentó en la concesionaria oficial, anunciándose en portería, notificaron su llegada y luego lo invitaron a subir por una escalera a la oficina de ventas. Al entrar se encontró con una especie de Hall en el que había siete personas, dos parejas y tres hombres solos. Miró sus rostros y todos tenían un gesto adusto, malhumorado, algunos fumaban como chimeneas. Le consultó a uno que sucedía. -Que no entregan en fecha, no entregan - espetó con rabia, a la derecha y hacia el fondo vio una oficina, con puerta de Cristal Blindex, adentro una mujer elegante de unos 45 años estaba detrás del escritorio, delante del mismo un hombre de pié hablaba a los gritos y gesticulaba con los brazos. En un momento dado paró, se retiró de la oficina, pasando a su lado como una tromba, salió a las escaleras dando un portazo detrás de él. A los pocos minutos llamaron a Pablo por su nombre para ingresar a esa oficina. -La Mujer le tendió la mano presentándose – soy la gerente de ventas. Pablo estrechó su mano y se sentó frente a ella. - Bien, bien estoy viendo en el monitor ¿Usted viene por un auto gris metalizado? Si, pero cual tiene en existencia - Preguntó el. Uno negro azabache - le respondió- Por una vidriera a su derecha pudo ver el auto negro en planta baja. (Si le pintan de amarillo el techo puede ser un taxi) pensó para si Pablo) Con una sonrisa le dijo, me gusta, hagamos los papeles y me lo llevo. - De acuerdo, baje por la escalera de atrás ya les aviso para que le entreguen todo, tendrá que aguardar una hora al menos. –Ningún problema, espero, gracias.
Una hora más tarde salía con su auto con olor a nuevo, y un andar espectacular.- Ahora Mariana me mata, pensaba, pero ya se le pasará. Cuando llegó a su apartamento estacionó frente al garaje. Entró y al ver a su mujer le dijo, traje el auto, únicamente no pude conseguir el color. - A ver, a ver, salió a la puerta quedando perpleja, ¿Es negro? ¿Me estas tomando el pelo? -No querida tuvo que ser así. - Déjame que te explique.- ¡Basta! no me expliques nada, estoy furiosa –Replicó ella volviendo a entrar a la casa. Esa noche ella se encerró en el dormitorio. El prefirió dormir en el sofá. Trascurrieron tres días con mínima comunicación entre ellos. El viernes por la tarde Mariana recibió un llamado de su amiga Cecilia. ¿Sabes que ocurrió? ¿Qué? Allí donde tu marido compró el auto, los dueños se fugaron con todo el dinero, dejando parados a sus empleados, y muchos autos sin entregar. ¿No me digas? ¿Y que van a hacer los clientes? Reclamaran a la fábrica para que se haga cargo, pero vaya a saber que tiempo lleva.-Gracias Cecilia, me he portado muy mal con Pablo veré como disculparme, gracias nuevamente.
Esa noche ella le contó sobre los sucesos. Menos mal que sacaste nuestro auto le dijo. -Bueno ahora me entiendes, estando allí, con el clima de tensión que había se me prendieron las luces rojas, tenían nuestro auto anterior y nuestro dinero. No dudé en traerme el que había, por lo que veo, no me equivoque. Si, mi amor, no volveré a enojarme así, tú sabes bien lo que haces y por que lo haces. Mira, tengo la espalda cansada, ¿Qué te parece si nos damos una ducha juntos como otras veces? ¡Esa es una buena idea! ¡Esta es mi chica ja,ja,ja! Ve tú adelante que ya te alcanzo –Replicó Pablo. Minutos después entraba bajo la ducha masaje ando el cuello y la espalda de Mariana. (Que sucedió después no lo puedo decir porque entramos en horario de protección al menor ja,ja,ja) pero que gozaron esa ducha…sin duda…….
Agradezco tu visita y comentario si gustas..
24 comentarios:
Migue,paso también a este blog para leer esta amena e interesante historia...Es bueno estar atentos a nuestro alrededor y no cerrarnos en una idea,sino adaptarnos a las circunstancias.La vida suele ofrecernos varias perspectivas para elegir y distintas sendas en el camino.
Mi felicitación y mi abrazo grande,compañero de letras.
Feliz fin de semana y mucho ánimo al pueblo argentino.
M.Jesús
Jajajaja... Migue, por un momento creí que la historia era real.
Le has dado una mezcla agri-dulce muy interesante... ;)
Un abrazo.
María Jesús me alegra que te haya gustado. Como dices es bueno estar atentos, tomando decisiones acordes con la situación que vivimos.Algunos se ofuscan, otros piensan mejor,por lo que deciden mejor.
Gracias por tu solidaridad por el momento que está pasando mi país.
Un abrazo enorme para ti amiga.
Manuel, te he hecho reír, eso es bueno jajaja. En realidad todas las historias tienen a veces una parte de realidad, enmarcada en la ficción.Ésta tiene la suya.
Un abrazo amigo.
gracias migue por regalarnos esta historia que no se si muchos se abran sentido identificados cuando por casualidad pueden habe ido a comprar un auto nuesvo y les paso esto,porque mas alla de que esta historia sea ficticia han pasado estas cosas lamentablemente jugando con el dinero y la ilusion de las personas.
un abrazo amigo y feliz fin de semana.
Es cierto Sony, te aseguro que estoy más tranquilo comprando una casa,porqué estoy en el tema. Que comprando un auto,con todos los riesgos que implica, patentes mellizas, números de motor y otros alterados,con deudas, etc.En fin historias como esta son para abrir los ojos, ya que es mucho lo que pone en juego el comprador.Y mucho sin vergüenza en el mercado,mezclado con el honesto.
Feliz fin de semana para ti,un abrazo.
Por lo menos esta historia termino magnificamente bien. Estuvo muy intuitivo el muchacho, cuantos casos vemos de concesionarias fantasmas que se llevan el dinero, el esfuerzo y las ilusiones!
Muy buena tu historia con un toque de humor sutil.
Un abrazo, feliz domingo.
Bien está lo que bien acaba.Tampoco había razón suficiente para que se enfadase así.
Total un color...
Un abrazo
Katy,parece mentira que se enfade por un color que no era el deseado,pero hay quienes maduran luego de vivir la experiencia.
Un abrazo.
Gracias Carolina,todo se mueve con mucha prisa,pero en asuntos de dinero por medio,hay que prestar atención, a lo que dicen y lo que hacen.El toque de humor me gusta esté presente.
Un abrazo.
Feliz domingo para ti también.
Jajajajja muy bueno tu relato ¿sabes que me ha sacado sonrisas? sobre todo ese final que ha tenido la historia y esa gracia que has tenido tú que parece andaluza de lo salada frase al decir que no puedes decir lo que sucedió después porque entramos en horario de protección al menor jajaja muy buena, sí señor, esa caída.
Me ha enganchado tu relato hasta el final, pero lo que me parece muy superficial es que ella se enfadara por lo del color del vehículo, yo creo que no era para tanto, pero ya sabes, ésto también puede suceder en la vida real, hay gente para todo.
Y qué ladrones hay por el mundo también ¿verdad?
Me ha encantado tu relato amigo mío, y quiero decirte que después del mensaje que me enviaste hoy yo luego te mandé otro respondiéndote diciéndote que en el otro blog te puse eso por decirte algo allí y se me ocurrió decirte esa bobada, pero que ya sabes que es un placer leerte, y aunque algunas veces llegue tarde porque visito muchos blogs, siempre llego, y para nada es obligación estar aquí, sino todo lo contrario, es un auténtico placer leerte, de verdad.
Un beso amigo mío.
Ah, y se me olvidaba desearte un feliz comienzo de semana ya.
Por cierto ¿qué horario tenéis allí ahora de diferencia? aquí hemos adelantado la hora y ahora son las 23:26 de la noche.
Otro beso.
Me alegra que te haya sacado una sonrisa.Hace un par de años leí en un blog de tu país,a un hombre que luego lo cerró por problemas de su espalda.Algo que me hizo destornillara de la risa, era increíble su gracia.
Es buenos que nuestros blogs sean amenos,compartamos experiencias, atrapemos con suspenso,hagamos volar la imaginación con sensualidad, y que mejor que hacer reír también.
Un beso amiga.
Bueno, corté tu comentario antes de tiempo. Aquí hace años que no se cambia el horario como antes. Honestamente no se cual es la diferencia horaria actual,al momento de escribirte estas líneas son aquí las 19,55 hs. Ya ha obscurecido...
Un beso.
Muy ameno tu relato. Siempre un placer pasearme por tu espacio.
un fuerte abraxo!
Es todo tan frágil...
Hasta los sentimientos se arreglan y desarreglan en función del dinero.
Saludos.
Buen relato, amigo, en el que lo cotidiano y lo fantastico se entrecruzan...
Un abrazo
Ayyyy MIGUEL, peroooo ¡¡mira que somos caprichosas a veces las mujeres... bueeno, ambos, a veces vosotros también naturalmente!! lo cierto es que la mayor parte de las discusiones y enfados domésticos si los analizamos son por bobadas... está claro que en la pareja de tu historia el que es un cielazo además de muy hábil e intuitivo es PABLO.
Un placer leerte, muchísimas gracias por pasarte por mi blog y como acabo de recordar ahora mientras contestaba a tu amable comentario por tomarte con tanto humor la vez que recién abierto mi Face ( que a penas uso por cierto:-) os dije a todos creyendo que solo lo leería nuestra querida MARIETA que si érais la manada que me mandaba ella jajaja
Un beso MIGUEL... recuerdos a tu Scarlett:))
Gracias Marilyn,siempre habrá historias nuevas.También me place visitarte.
Un abrazo.
Hola Toro, todo es frágil,parece tomado por finos cabellos.
Un abrazo.
ANTIQVA, me alegra te haya gustado, tus fotografías son imperdibles.
Un abrazo.
María,bienvenida, un sin fin de discusiones surgen por problemas domésticos,en los que una al menos de las partes toma capricho. Pablo le tuvo paciencia,y terminó bien. Pero hay que ver la cantidad de situaciones que se generan y terminan hasta con separaciones...Es que no se tienen paciencia jajaja. Un beso María.
PD: No hallé la forma de seguir tu blog????
Una jugada magistral...
Me haces pensar en esa diferencia que siempre tenemos con nuestras mujeres, que el color, que el tamaño, que de madera o de plástico, creo que es una forma de mantener el fuego de la pasión encendido a través de la pelea, de la disconformidad.
Un fuerte abrazo, Migue.
HD
Gracias Humberto...
En este relato,luego de discusiones, llegó lo mejor que fue la reconciliación.
Un fuerte abrazo para ti
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